El buen desempeño de los empleados es clave para las organizaciones. Crear las condiciones para el crecimiento de cada trabajador, sin abrumarlo, será una tarea interesante para los gerentes.
Hoy en día, hombres y mujeres se dan la tarea de enfrentar cada reto que surja en vida, los desafíos forman parte de su crecimiento tanto en su vida profesional como en su vida personal. Cuando los individuos ignoran estos obstáculos, frenan la oportunidad de crecer, lo mismo sucede en las organizaciones. Cuando los empleados dan paso a la paralización, se va creando un clima de desarticulación en su seno.
Generalmente, las personas que tienen esta sed de crecer, son arropadas por el estrés. En esta época han aumentado los controles organizacionales, la restructuración en sus bases también ha sido evidente, la multiplicidad de trabajo que recae en una sola persona (tareas específicas que es necesario realizarlas entre dos o más personas); estas consideraciones son las causas del desgaste en la salud, la motivación y el rendimiento en los trabajadores.
Este fenómeno, llevo a medir el nivel de estrés que cubre a los trabajadores. Dos preguntas fueron calificadas por los empleados, la primera “mi trabajo me obliga a ser eficiente” y la segunda pregunta “la cantidad de trabajo que se espera que haga es razonable”.
Esta encuesta se había realizado anteriormente, en el año 2017. En comparación con los resultados del 2017, este año demostró un aumento significativo en la primera pregunta, este crecimiento ha sido a un 17%. Mientras que la segunda interrogante disminuyo un 14%. Estos números, permite ver que las organizaciones están exigiendo a los trabajadores ser más eficiente en el trabajo, es decir, doblar sus esfuerzos para lograr el resultado, retarse a enfrentar los desafíos.
El estrés ha sido objeto de estudios por especialista, muchos han coincidido con la existencia del estrés saludable y el estrés toxico. En el primer caso, se producen dilatación en los vasos sanguino por lo que aumenta el flujo sanguíneo y estimula al cerebro y músculos. La Universidad de California en San Francisco, asegura que estos síntomas son comparados con ejercicios aeróbicos.
En el segundo caso, ocurre una contracción en los vasos sanguíneos, y aumenta la presión arterial, estos síntomas se manifiestan cuando hay enojo en las personas, pensamientos nublados que extraen a la persona de su eje corporal y mental y lo más peligroso, genera latidos cardiacos errados.
El estrés se puede mirar como un globo de celebración, al soplar este globo expande sus límites elástico, pero al exceder estos límites de aire, el globo entra en un colapso y explota. Considerando esta analogía, el globo en este caso, corresponde a la mente del empleado que se encuentra bajo presión. El desarrollo y retos laborales significan la expansión del globo, mientras más desafíos más se van expandiendo el globo. La expansión asemeja al estrés.
Hans Selye, endocrinólogo le dio nombre a estos dos tipos de estrés, eustress que corresponde al estrés saludable y angustia al estrés toxico. El primero comenta el endocrinólogo, “las personas se sienten capaces, emocionados y totalmente comprometidos”, a diferencia de la angustia que genera ataques de ansiedad y depresión, convirtiéndose en enfermedad mental y física.
Como se ha observado, todo depende de la reacción que tienen las personas antes los desafíos, recordando que estos estímulos permiten el crecimiento profesional y personal.
Por último, los gerentes tienen una tarea interesante, ya que ellos deben crear las condiciones para un buen desempeño de sus empleados, así como motivar y abrir nuevas oportunidades de crecimiento. Esto pude significar estresante pero no angustiante para los gerentes.