La guerra comercial entre China y los Estados Unidos, se retoma, luego de los anuncios de Donald Trump sobre la imposición de los aranceles. Esto ha traído como respuesta, la caída del yuan hasta el nivel más débil y la suspensión de las importaciones de productos agrícolas estadounidenses.
Las medidas tomadas, y las monedas de los mercados emergentes cayeron por la preocupación sobre este conflicto económico entre las dos superpotencias, se presume que afecte el crecimiento económico mundial. Mientras tanto, los activos de refugio, incluidos el yen japonés, los bonos del Tesoro y el oro, aumentaron.
A través de un comunicado, el gobernador del Banco Popular de China, Yi Gang aseguró que el yuan no será usado como medio para enfrentar las disputas comerciales. "Estoy totalmente seguro de que el yuan seguirá siendo una moneda fuerte a pesar de las fluctuaciones recientes en medio de las incertidumbres externas. El banco trabajará para garantizar la demanda razonable y legal de las empresas y el público de divisas”, dijo.
La línea más dura en Beijing dijo que Donald Trump, es una persona en la cual no se puede confiar. Comentaron que están esperando las elecciones 2020 en Estados Unidos, con la esperanza que gane algún demócrata que este en desacuerdo con el uso de aranceles. Algunos expertos en campañas políticas, aseguraron que la interrupción de las compras agrícolas, podría ser contraproducente para la campaña de Donald Trump.
Según algunos datos, el índice MSCI Asia Pacific cayó un 2,1% el lunes, está es la mayor caída que ha sufrido. Las acciones europeas y los futuros del índice S&P 500 también retrocedieron, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro de EE. UU. A 10 años disminuyó aproximadamente 8 puntos básicos a 1,77%, el nivel más bajo desde 2016.
A tempranas horas del lunes, el yuan en tierra se había debilitó alcanzando un 1.4% a 7.0391 por dólar, después de que el PBOC fijo su tasa de referencia diaria en un nivel más débil que 6.9.
"Romper siete se debe a una combinación de factores: una escalada de la guerra comercial, el debilitamiento de la economía de China y la voluntad del PBOC de tolerar una mayor volatilidad para el yuan. El PBOC ha entrado en aguas desconocidas, por lo que debe gestionar las expectativas con cuidado”, dijo Larry Hu, jefe de economía de China en Macquarie Securities Ltd. En Hong Kong.
Según el economista de China en UBS Group AG, Wang Tao, dijo que quien más sufre por esta guerra comercial, es la actividad empresarial y la confianza que proviene de una mayor incertidumbre en el lugar de los aranceles en sí. Según el economista, con este panorama, el yuan más débil tiene pocas estrategias para compensar el golpe.
Por otra parte, las importaciones de cultivos de China desde los Estados Unidos pudieran ser otro elemento a favor de China. Las grandes estatales de China, han dejado de adquirir productos agrícolas estadounidenses, incluyendo las sojas.
Trump dijo que llevaría a cabo la imposición de impuesto, ya que China no había realizado “grande compras de productos agrícolas”, como lo habían acordado en la reunión de Osaka en la cumbre del G-20.
Sin embargo, Cong Liang, secretario general de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma tildó estos argumentos de “falsos”. Por su parte, el economista de Maybank Kim Eng Research Pte., Chua Hak Bin dijo "China está renunciando a su estrategia diplomática más suave y ya no está dispuesta a ser el saco de boxeo de Trump. Las amenazas arancelarias son contraproducentes y desencadenan una guerra comercial a gran escala", dijo.
ResponderReenviar