Los representantes gubernamentales y estatales, iniciaron el debate legal sobre la incorporación de autobuses eléctricos a la cantidad de sus autobuses escolares. Aunque ya hay localidades donde existen estos autobuses eléctricos, como por ejemplo, Gilroy, Napa y Torrance en California; aún presentan obstáculos que obstaculizan su aprobación inmediata.
Los autobuses eléctricos, pueden resultar no apropiado en cuanto a las temperaturas para las estaciones de invierno y verano, y esto se debe, al agotamiento de las baterías que puedan usar. La calefacción es de suma importancia para el traslado de los estudiantes, es por esto, que dentro de las posibles soluciones planteadas, se encuentra el uso de “energía solar”, por medio de paneles solares ubicados en los techos de los autobuses, así como también, la implementación de calentadores de gas.
El gran beneficio sobre el uso de autobuses eléctricos, representa la disminución del consumo de gasolina, ya que a pesar de ser recursos accesibles, las reservas de gas natural y petróleo están bajando su tamaño, creando incertidumbre en la tasa de consumo. Por esta razón, la producción de autobuses eléctricos abre paso a la disminución del uso de estos combustibles. Además, es importante mencionar que lograr la disminución de este combustible, es eliminar las emisiones de gas en tanto sea posible, garantizando un medioambiente más limpio.
Aun cuando este tema todavía se encuentre en debate, ya existen industrias que se encuentra produciendo y distribuyendo estos autobuses a distintos colegios dentro y fuera del País, entre estos se encuentran. Lion y Blue Bird (productores de autobuses eléctricos), el primero logro fabricar tres autobuses con distinta capacidad de pasajeros, que van de 26 a 70 personas dentro del autobús, recurrió al uso de baterías de 100 millas y cada uno tiene una ruta específica de acuerdo a sus cualidades. En el segundo caso, Blue Bird, logro lanzar dos autobuses eléctricos, con capacidad que van de 30 a 84 personas dentro del autobús, usando también una batería de 100 millas.
Aun cuando existen otras alternativas como el uso de las bicicletas o caminar las distancia desde las casas hasta los colegios para disminuir la misión de combustible, la confianza por los autobuses eléctricos continua creciendo para los inversionistas y los compradores.